EL PADRE LEONARDO HABLA A LOS NIÑOS…

El Maestro empezó hablándoles así: “Ahora quiero deciros a todos los niños del mundo que cuando seáis mayores y os decidáis a coger cualquier oficio o carrera, decidiros por la que más os guste con el ánimo de triunfar. Pero no lo hagáis por la fama ni por el dinero, hacedlo más bien para enseñar mejor a todos aquellos que vayan y quieran aprender de vosotros.”

“También debéis de tener en cuenta que si en vuestra clase o fuera de ella hay una o varias personas de otra raza debéis de tratarles con el mismo afecto que a los demás, ayudándoles en todo lo que podáis y compartiendo vuestro almuerzo o merienda si ellos no tuvieran.”
“Porque daros cuenta, que cada vez que se rechace a una persona porque sea de diferente raza, o ideología, estáis rechazando a Dios y a vosotros mismos. Porque cuando dejéis el cuerpo que lleváis iréis a un mundo espiritual y allí os daréis cuenta que de poco os ha servido vuestra estancia en la tierra, referente a vuestra elevación. Porque debíais de saber, que vuestra elevación depende de vuestro comportamiento y amor hacia los demás. Como también debéis de saber, que el espíritu no tiene color, por lo tanto cuando volváis a coger otro cuerpo será de diferente raza a la que pertenecéis."

–Si escogéis el oficio de:
–Maestro:
“Lo más importante en la vida de un niño es el comportamiento hacia ellos, porque según se les trate o aconseje, así obrarán ellos cuando sean mayores.”

“Con esto quiero deciros que no os importe la fama ni el dinero, lo que os debe de preocupar es enseñar lo mejor posible a los niños el comportamiento que deben de tener a medida que vayan creciendo. Enseñarles la caridad y el amor hacia el prójimo. Ahora os pido, que seáis los primeros en enseñar a los niños de dónde vienen, a qué han venido y a dónde van después de dejar el cuerpo.”

–Médico:
“(…) Pues muchas veces el amor y la confianza que el médico da al paciente hace más efecto que la medicina. Si una persona no tiene suficiente dinero para pagaros, atendedla con más amor y poniendo más atención, ya que a esa persona al ver que no le habéis cobrado le costará más veces de volver a la consulta porque ella misma pensará que está abusando de vuestra buena voluntad.

Y si sois cirujanos y se os presenta un caso de vida o muerte, viendo vosotros que esa persona puede salvarse con la operación, aunque esta persona no tenga dinero, haced lo posible por operarla a cambio de nada, “sí, a cambio de nada”, porque ahí está la medida de vuestra elevación, ayudando a vuestros hermanos.”

–Sacerdotes:
“Si alguna vez algunos de vosotros llegáis a ser sacerdotes habéis de ser pacientes y misericordiosos. Así como también debéis saber que de vuestro comportamiento hacia el prójimo depende la humanidad.

Dad vuestra ayuda a todo el que lo necesite, empequeñeceos para hacer sobresalir a los demás, no dejéis que ellos os sirvan, ser vosotros sus servidores y enseñarles que el más fuerte entre ellos será el servidor de todos. De vuestra enseñanza, amor, fe, caridad y ejemplo que deis, así cogerán todos los demás.
Cuando os acerquéis a los niños poneros a su altura, dadles vuestra confianza y decidles siempre la verdad, y así os ganaréis su confianza por completo.
Saber que las cosas de Dios no se compran ni se venden, y todo aquel que sirva a Dios, sólo se debe preocupar de las cosas de Dios. Y si gratis os lo doy, dadlo gratis.” “(…) Pero no les aconsejéis diciéndoles, como por ejemplo, que lleven velas a los santos, etc., porque pronto se darían cuenta de que los santos son de madera o de escayola y no necesitan velas ni limosnas.
(…) Y todos debéis saber que sólo a Dios debéis de adorar, porque “sólo Dios es santo”, por lo tanto no hay más santo que el Señor.”

–Científicos:
“(…) Lo que no me gustaría que hicierais si llegáis a ser científicos es que neguéis una cosa que vosotros no hayáis visto ni probado científicamente. Y tened en cuenta, que Dios puede revelarle a algunas personas cuanto quiera.

Daros cuenta que si Dios manda a un espíritu para que dé un consejo o mensaje a cierta persona, ¿cómo podríais comprobar científicamente esto, si la voluntad de Dios ha sido que lo vea esta persona y vosotros no?
Y de hecho espíritus hay muchos e incluso llegan a estar al lado de vosotros, pero vosotros no lo oís ni le veis, y ni tan siquiera percibís su presencia y aquí es donde se comete el error, ya que por no verlos no lo creéis.”

–Periodistas:
“(…) Por eso os digo, que cuando seáis mayores informaros bien antes de dar una mala noticia, porque daros cuenta que esto puede llegar a destruir a familias enteras.”
“Tened en cuenta que vosotros también habéis venido a cumplir una misión a la tierra, y si vosotros pensáis en disfrutar engañando y hundiendo a los que no os caigan bien os digo, que si actuáis así vuestra elevación espiritual llegaría a estar tan baja que por muchos años que durarais en esta vida no os serviría para nada, vuestro atraso sería fatal, y después de morir vuestro espíritu tiene que venir de nuevo a la tierra, y entrar en otro cuerpo para tratar de hacer bien lo que no habéis hecho en esta vida.”

–Cine y televisión:
“A los que de mayores desempeñéis algún trabajo en cine o televisión os digo que si alguno llegáis a ser directores o productores de cine o televisión tratad de pensar bien qué clase de películas vais a sacar a la luz, porque de esas películas que vosotros saquéis, tened presente que la gente joven aprenderán y querrán hacer en la realidad lo que han visto en la película. O sea, que lo que vosotros habéis hecho por fama y por ganar dinero servirá para instruir a los jóvenes por buen o por mal camino.”

“Según la ley el que mata es el criminal, pero yo os preguntaría a vosotros, ¿quién es más culpable el que mata o el que enseña?... Porque si el que mata ya tiene un atraso de varias vidas, el que enseña, aún tal vez ignorantemente, le repercute mucho más en su elevación espiritual, porque daros cuenta que lo que enseña no es sólo para una persona sino para muchas y, además, estas enseñanzas pueden durar mucho tiempo.”
“Os repito una vez más que Dios siempre os perdona pero vuestra elevación espiritual os la habéis de ganar vosotros mismos con vuestra ayuda y amor al prójimo.”